jueves, 31 de enero de 2008

Arma Fatal (Hot Fuzz)

Arma fatal (Hot Fuzz): hay que ver, que grata sorpresa me llevé con Arma fatal. Hacía tiempo que no me reía tanto y tan a gusto con una película de estas características. Hilarante -de principio a fin- parodia inglesa de humor inteligente cargada de referencias al cine de acción y terror. Rinde homenaje y a la vez se ríe de ellas y de ellos mismos. Que diferencia con otras parodias del tipo Epic movie, Date movie, o Scary movie 4. Mientras estas te hacían vomitar y retorzerte en el asiento (menos mal que no pasan de los 85 minutos), Arma fatal da gusto verla. Había leído cosas buenas de ella, pero no me esperaba ver lo alocada y desternillante comedia que iba a resultar. Tras el súper exitazo que tuvo Edgar Wright con su particular parodia sobre las películas de zombies en Zombies Party, nos llega ahora el turno de parodiar el cine más americano (que ironía porque la producción y dirección es inglesa) con el típico cine policíaco lleno de explosiones y efectos pirotécnicos tan característicos y hollywoodienses de este tipo de cintas. Todos los minutos de Arma fatal, destilan humor inglés por los cuatro costados, tanto en las situaciones expuestas, como en el arquetipo de los personajes creados, todos perfectamente definidos e interpretados. Acompañado al guión por el actor protagonista de esta historia, Simon Pegg, ambos consiguen formar una pareja perfecta a la hora de escribir la cantidad de gags y chistes que abundan en Arma fatal, y que elevarán el calificativo de gamberrada a cotas insospechadas. La cinta gira en torno a un superpolicía inglés que es trasladado a un aparentemente pacífico pueblo londinense. Pero mucho más lejos de la realidad, el pequeño pueblo se tornará una caja de sorpresas, con todo tipo de vecinos y situaciones de lo más hilarantes y excéntricas. El director y guionista, se hace eco de todos los tópicos y clichés del género de acción para perpetrar una de las mayores gamberradas de 2007. No sólo nos encontraremos con el humor más inglés, sino que también hay cabida para el humor absurdo (más común en el cine de la pareja Abrahams-Zucker), chistes, gags, situaciones surrealistas, y parodias de otras cintas de acción como Le llaman Bodhi o Bad boys II. Aparte de ser una mezcla de acción y comedia, sobretodo comedia, tenemos una buena parte de parodia al cine de terror, tipo Scream y Se lo que hicisteis... Así que veremos al mil veces visto asesino enmascarado que va aniquilando a la "pobre" gente de la localidad. Y aquí es donde el director se apunta un tanto; pues como ya pudimos disfrutar en Zombies party, Edgar Wright nos muestra las escenas de sangre y gore como deben ser; bien explícitas. De esta forma, los amantes del género, entre los que sin duda me encuentro, veremos satisfechas nuestras inquietudes resueltas con los asesinatos que se va produciendo. Así pues, tendremos nuestra buena dosis de casquería y sangre gracias a hachazos, desmembramientos, apuñaladas y aplastamientos diversos; todo ello aderezado de una buena base cómica. En cuanto al guión, lleno de excentricidades por supuesto, no hace aguas en ningún momento, manteniendo la expectación en el espectador pese a las dos horas de metraje que tiene el film. Esto es debido en buena parte, al montaje frenético que tiene la cinta, recordando por momentos (en lo inglés y frenético) a las obras del siempre controvertido Guy Ritchie. Por otro lado, todo lo malo recae a los responsables de su distribución en España y al director de doblaje. En primer lugar, el título en español resulta manido y mil veces visto, HORROROSO. Si el responsable de marketing pretende atraer al público con ese título va listo... Y luego está el penoso doblaje que acompaña la obra. Si tienes la oportunidad de verla en V.O no lo dudes. En definitiva, atractiva, ingeniosa, y sorprendentemente entretenida y divertida; un excelente e ingenioso retrato y a la vez parodia del cine policíaco, muy superior a la media de parodias que tanto proliferan hoy en día y que simplemente se quedan en un quiero y no puedo. Con un humor muy equitativo, desde algunos chistes fáciles hasta el humor más inteligente, mordaz y satírico se dan cita en Arma fatal; un film que nos deja un excelente sabor de boca. Parece ser que el tandem formado por Wright y Pegg sigue funcionando. Puntuación: 8 sobre 10.

martes, 29 de enero de 2008

Entre copas

Entre copas: sorpresa con mayúsculas me llevaba mientras veía Entre copas. La verdad es que Alexander Payne había dejado el listón muy alto con la genial A propósito de Schmidt y la satírica Election, pero con su último largometraje hasta la fecha (sin contar su mini historia de Paris je t'aime), ha conseguido sellar una magnífica tragicomedia con deliciosos diálogos punzantes en forma de dardos que Payne dispara sin cesar. Con 2 Globos de oro y un Oscar al mejor guión adaptado de 2004 a sus espaldas, Entre copas (película indie de 2004) resulta un soplo de aire fresco que tanto se agradece ante la avalancha de cine comercial americano donde nos sobran tiros y explosiones. Simplemente con un guión brillante, y un elenco escogido a la perfección, queda demostrado que puedes firmar una de las mejores cintas de 2004. Una comedia inteligente y hecha para gente inteligente, logra su mayor baza en que no caer en el chiste zafio y fácil, sino en unos diálogos muy trabajados y mezclados con situaciones surrealistas donde es imposible evitar que el espectador esboce una mínima sonrisa en su rostro. A través de los parajes vinícolas de California, asistimos a una road movie de insospechado destino. Inicialmente como un viaje de solteros cachondo y divertido, pasa a desembocar en una tragicomedia de segundas oportunidades, y el viaje de despedida de esa juventud ya perdida, poniendo especial énfasis a la verdadera amistad. En Entre copas, el director interpone a dos personajes completamente opuestos y a través del intercambio de ideas u opiniones consigue de una forma fluida y recurriendo al humor más irónico y a veces negro, cerrar una comedia agridulce de lo más agradable. Desde los primeros minutos, reconoces el fuerte magnetismo de la película, que sin darte apenas cuenta te va enganchando poco a poco y lo único que quieres es ver que va a ocurrir en la siguiente escena, y como la resolverán nuestros simpáticos protagonistas. El cuarteto de actores es fabuloso, sobresaliendo un estupendo Paul Giamatti como novelista fracasado y divorciado amante del buen vino Pinot, y que únicamente busca la elegancia y buen sabor de una buena botella de vino, en vez de la de una mujer. Luego tenemos a su opuesto amigo Thomas Haden Church, un actor a punto de casarse donde usará el viaje como último atisbo de libertad y simplemente se conforma con un barato Merlot en vaso de plástico. El dúo femenino lo completan la televisiva Sandra Oh (de Anatomía de Grey), como experta del buen vino, soltera e independiente que irá a parar a los brazos del actor. Y por último, Virginia Madsen, una camarera divorciada e insegura de si misma que busca desesperadamente la atención de un hombre interesante. Alexander Payne, irónico y maestro observador del comportamiento humano, consigue lo que verdaderamente importa: algo tan sencillo y que siempre funciona como las historias y los personajes que los interpretan, y firma una obra sobre la amistad de dos hombres muy distintos y perdidos en sus respectivas vidas que sólo buscan un último golpe de suerte en la vida. Un excelente relato emocional donde busca en todo momento la complicidad del espectador y juega con ese sentido del humor que la mayor parte de las veces surge precisamente de cierta tragedia. Muy recomendable. Puntuación: 7,5 sobre 10.

domingo, 27 de enero de 2008

Mulholland Drive - Inland Empire

Mulholland Drive: no sé muy bien como empezar este comentario sobre la inclasificable obra de David Lynch, así que simplemente diré que es espectáculo visual estupendo. Magia para los ojos. Onírica, hipnótica, ambigüa, poética y maravillosa. Perturbadora hasta el infinito. Caótica en todos los sentidos. Es una de esas obras que no deja indiferente a nadie, o la odias o la amas; y yo precisamente soy de los que la ama. No intentes buscar lógica o coherencia alguna durante su visionado (ni tras el), únicamente déjate llevar por lo que transmite. Abre la mente y prepárate para un viaje sin retorno hasta el universo Lynch. Y es que esto señores, es Mulholland Drive. Película tras película, David Lynch no deja de sorprenderme y apasionarme a partes iguales. La fuerza y energía de sus imágenes es apabullante. Esa habilidad que tiene para mezclar las situaciones y contexto es de un genio. El tratamiento que le da a la música en todas sus películas resulta misterioso, impactante y acertadísimo. Lynch tiene esa capacidad innata en algunos directores de dejar en estado de shock al espectador tras sus películas. De dejar que sea el mismo espectador quien interprete y le de forma a lo que acaba de ver. Lynch te da el lienzo y las pinturas, y eres tú quien debe pintar el cuadro. Lynch te insinúa y tú interpretas. Lynch no muestra y tú buscas desesperadamente "algo" en el plano. Lynch nos da un rompecabezas, y somos nosotros quienes debemos montarlo. Que genio de la sugerencia tiene el séptimo arte. Y que dure por muchos años más. De apasionante atmósfera delirante, austera e inquietante te atrapa a los pocos minutos y lo mejor que puedes hacer es dejarte llevar. He llegado a la conclusión de que con el cine de Lynch hay que abandonar toda esperanza de lógica y coherencia, dejar de buscar el porqué de las cosas y zambullirse de lleno en lo que nos vomita Lynch. En cuanto al elenco de Mulholland Drive, sobresale una estupenda Naomi Watts por encima de todos y todas. Con su doble papel (PISTA) intenta engañar (más bien Lynch) al espectador para confundirnos y que no entendamos nada. Estamos en sus sueños, y en sus sueños todo puede ser posible. Luego tenemos a una muy sensual Laura Helena Harring también bordando su papel de amnésica donde la ambigüedad y el desconcierto se apoderan de él. De fotografía oscura y tenebrosa, juega con los colores a su antojo (sobretodo azul y rojo, PISTA), a la vez que mueve la cámara de una forma tan subjetiva, que parece que la lleves tú mismo en algunos momentos (escena del vagabundo y dentro del apartamento). Atención al orden que le da Lynch a los títulos finales (que pillo eres, David); en orden de apariencia... (PISTA). Con escenas memorables, como la mordaz crítica al mundo de Hollywood y sus peones; escenas difíciles de olvidar y cargadas de sentimiento como en el teatro o en la audición; y momentos de una belleza extrema como la escena lésbica, Mulholland Drive se convierte en todo un referente del cine actual; lleno de simbolismos y cargado de metáforas. En definitiva, un relato que desmorona por completo todos los convencionalismos cronológicos y narrativos a los que estamos acostumbrados. Lynch coge los cánones y clichés del cine normalmente aceptado por el gran publico y les da un giro de 180 grados. Hipnótica y onírica es una cinta para el disfrute de los sentidos. Inteligente a más no poder y perfectamente hilvanada y estudiada por Lynch, resulta de lo más estimulante. Lo mejor de Mulholland es la sensación de satisfacción y plenitud que te otorga cuando la has entendido. Puntuación: 9 sobre 10.


Inland Empire: antes de nada, comenzaré mi particular visión de Inland Empire con unas palabras propias de su director, David Lynch, cuando buscaba financiación para terminar de rodar su última obra: Les dije dos cosas, estoy rodando en video digital y no sé lo que estoy haciendo. Con dos cojones Lynch; más sinceridad imposible. Y no contento con eso, terminó su argumentación diciendo: Nunca vi una totalidad. Sólo vi hoyos. Un montón de ellos. Pero eso no me preocupaba. Se me ocurría una idea para una escena y entonces la filmaba. Se me ocurría otra, y la filmaba. Ni siquiera sabía cómo podían relacionarse entre sí. Cierto es que tras Mulholland Drive, esperaba mucho otra vez del Sr.Lynch; y como siempre pasa en estos casos, lo esperado acaba decepcionando. Inland Empire posee una innegable potencia visual, desgarradora, oscura y siniestra. Es un espectáculo visual sin paliativos, aderezado todo con un toque de misterio y desesperación para que tu mente se retuerza e intentes sacar una explicación más o menos lógica de lo que está pasando. Pero al contrario que pasaba con Mulholland Drive, esa explicacion no llega nunca, o por lo menos yo no la supe ver. Pero ya lo he comentado más arriba en Mulholland Drive, esto es el universo Lynch, y Lynch no es Michael Bay, así que abandonen toda esperanza de concordancia en la obra. Si con Mulholland Drive, Lynch puso los cimientos de la nueva era del cine posmoderno, rompiendo todos los cánones de estructura narrativa hasta le fecha, con Inland Empire ha dado un paso más, ha engendrado un nuevo cine, ha elevado su idea original a la máxima potencia. Ha hecho lo que ha querido y como ha querido. Y ha querido hacerlo en unas extensas tres horas de duración, repartidas en una hora de más o menos lógica y dos horas de inconexas escenas (in)comunicadas por puertas que nos abren paso a realidades paralelas, a cambios en el espacio temporal donde se nos mezcla el ayer, con el hoy y el mañana. Cine dentro del cine, eso es lo que se nos propone pero alterando el concepto de realidad y mezclándolo hasta el infinito. Laura Dern, el pilar básico y personaje sobre el que se sustenta la película está sobrenatural, adaptándose a cada escena a la perfección, y cerrando una interpretación de lo más compleja y creíble. Simplemente genial. Técnicamente es perfecta. Con una excelente imagen digital, con las virtudes y defectos que ello conlleva, nos regala una fotografía sucia y oscura, de textura granulosa e imagen artificial, pero que tan bien queda en todo el film. Gracias al digital, Lynch se permite jugar con la cámara a su antojo, deformar y adaptar la imagen de mil formas. Lo más llamativo en Lynch es la fuerza visual de sus imágenes, capaces de cargar de inquietud, misterio y hasta de miedo unos espacios angustiosos y opresivos. A lo largo del visionado, nos encontramos con cientos de primeros no, primerísimos planos donde podremos apreciar poros, manchas y cualquier tipo de desperfecto en la piel de los actores. Un montaje de luces, donde destacan el azul y el rojo (es Lynch) generando una sensación de proximidad inquietante con la protagonista. En resumen, excepcional película posmoderna de Lynch que rompe con todo y que gustará a sus fans más incondicionales. Abstenerse personas amantes del clasicismo y de la narrativa básica con planteamiento, nudo y desenlace; aquí no hay nada de eso, todo lo clásico se obvia y se destruye, dejando paso paso a los nuevos conceptos de cine moderno. Le resto dos puntos con respecto a Mulholland Drive por su excesiva duración y por no haber entendido al 100% el mensaje que quería transmitir Lynch; aunque no tengo muy claro que él mismo lo sepa, y no se esté riendo ahora mismo de mí y todos sus fans. Aún así, bravo David. Puntuación: 7 sobre 10.

jueves, 24 de enero de 2008

Donnie Darko

Donnie Darko: Pues esta vez me la coló Filmaffinity. Me la coló porque tenía una puntuación de 7,5 y yo, como siempre me fié de Filmaffinity. Pero no, esta excentricidad envuelta en forma de misterio y drama psicológico no me va a arañar más de un 6; y siendo verdaderamente generoso. Cierto es que empieza bien, empieza muy bien, pero poco a poco y a medida que avanza se va diluyendo de forma inescrutable queriendo abarcar más temas de los que en verdad puede soportar la cinta de Richard Kelly. Para empezar, tenemos a un misterioso y perturbado Jake Gyllenhaal (no le pega nada) como protagonista de la historia; haciéndose pasar por adolescente de instituto con veintitantos años largos. Pero eso no es lo mejor de todo, lo mejor es que ¡ATENCIÓN! Drew Barrymore (Drew, estas casi al mismo nivel que Sandra Bullock en mi lista negra; ¿que ha sido de la encantadora niña de ET?) hace de su profesora !!! Por Dios, si puede que él tenga más edad que ella en la vida real. De momento un 0 para el responsable de casting. Volviendo al film, parece que quiere arrancar, enganchar al espectador, hipnotizarlo por el misterio que lo rodea, pero todo se queda en un quiero y no puedo. De verdad quieres que funcione, pero no lo consigue. Todo el enigma que aparece al principio va a parar a saco roto, perdiendo todo lo sugerente y estimulante que resultaba. Quiere ser cine independiente y a la vez atraer al público juvenil con la historia del adolescente problemático en el típico pueblo americano. Todo esto está muy tocado ya, así que le colamos lo de los viajes en el tiempo, y listo; ya tenemos peli. No me lo trago. A parte de todo esto, el ritmo resulta tedioso y lento a partes iguales, con escenas sin sentido (pitufos) y cantidad de recursos que no llevan a ninguna parte (escenas y montaje con ritmo 100% videoclipero) y que sólo rellenan minutos de metraje. Vayamos ahora a las cosas buenas. La interpretación de Gyllenhaal es resultona e interesante. Empatizas bastante bien con su personaje, aunque no sepas que es lo que está pasando. La música está genial, encaja a la perfección en el "rollo" que se trae la película. La idea de partida es buena, pero como ya he dicho, se va diluyendo a medida que avanza. Quiere tocar muchos temas existenciales y filosóficos, y al final acaba por no completar en profundidad ninguno de ellos. El "conejo malvado" es impresionante. Para mí, lo mejor del film con diferencia. Consigue reflejar la angustia y desconcierto que siente el protagonista. Cada vez que aparece el film consigue dar verdadero miedo. Bravo para la gente de diseño. En fin, que parte de una buena premisa pero se queda en una simple intención. El final se ve venir desde lejos, un poco más de originalidad Sr.Kelly. La conversación de los pitufos, pitufina y la sexualidad ¿que pretendía?!! Por favor, deje el trabajo de las conversaciones absurdas al genio de Tarantino, y céntrese en su película; el público se lo agradecerá. En fin, no sé, me ha resultado demasiado pretenciosa en algunos momentos, y sobretodo en los últimos minutos. De temática parecida a la estupenda Atrapado en el tiempo, y a la sugerente El efecto mariposa. Sin duda para mí, está en el tercer lugar de las tres. En definitiva, sobrevaloradísima de cabo a rabo. Puntuación: 6 sobre 10.

Casino

Casino: mientras veía Casino, no podía dejar de encontrar paralelismos y coincidencias con un obra del fallecido Ted Demme. Me estoy refiriendo a la injustamente infravalorada, Blow. Algún día analizaré Blow, ya que me impactó muchísimo su visionado, y todavía la considero como una de mis películas favoritas. Pero volvamos a lo que nos ocupa y sustituyamos el mundo del juego en los casinos por el del tráfico de drogas, y tenemos dos obras extremadamente parecidas. Si, ya sé que Blow (2001) es posterior a Casino (1995), pero no he podido dejar de encontrar similitudes entre ambas. Desde la escalada de puestos en una organización ilegal, hasta la traición de tu mejor amigo, pasando por la pu** de tu mujer a la que sólo le importa tu dinero y la situación con la hija pequeña. Hasta un tema musical aparece repetido en ambas películas. Las dos cintas me han resultado muy parecidas, con un De Niro como Depp, Sharon Stone como Pe Cruz y Joe Pesci como Jordi Mollà. Parece que con Casino, Scorsese quería volver al cine que tanto le gusta, y que mejor se le da a la hora de dirigir. Tras dos obras que se alejaban un poco del contexto que se tenía de Martin, me refiero a El cabo del miedo, y sobretodo La edad de la inocencia, Scorsese retoma el cine que mejor sabe hacer. Casino se puede entender como una continuación a Uno de los nuestros, pero acaba siendo un refrito excesivamente largo (casi 3 horas de duración) repleto de clichés del género donde no aporta nada novedoso. ¿Lo bueno? Que Scorsese dirige, y dirige bien. Y lo hace dignamente y como uno de los grandes. Tras una larguísima introducción de personajes, nos espera un ritmo y montaje frenético, donde el mayor logro consisten en no aburrir al público (aunque todo lo hayamos visto una y otra vez) pese a su extenso metraje. De Niro está sublime como siempre, y con esos contrapicados que le hace Martin queda patente quien lleva el peso de la película. Sharon Stone está sencillamente increíble para ser ella la verdad. Y que decir de Joe Pesci, que supera (ya era difícil) con creces su papel en Uno de los nuestros reintrerpretándose a si mismo como matón sin cerebro. Simplemente brutal. De fotografía brillante y luminosa, consigue transmitirnos verdaderamente el estilo de vida de Las Vegas, y esos planos cenitales del casino son sencillamente geniales. Finalmente, lo que más me ha gustado ha sido la escena final, donde vemos a ritmo de The house of the rising sun de The Animals, la matanza de algunos miembros. Me ha recordado también muchísimo al final de El Padrino I, cuando Al Pacino indirectamente ejecuta su venganza mientras él permanece en el bautizo de su sobrino. Demasiadas coincidencias ¿no? Pese a todo, una obra completa y muy bien dirigida por Scorsese aunque a medio fuelle si se le compara con Uno de los nuestros, el pilar básico de la filmografía de Scorsese junto a Taxi driver y Toro salvaje. Para mi gusto claro. Puntuación: 8 sobre 10.

martes, 22 de enero de 2008

Nominados para los Oscar 2008

Bueno, pues como cada año para estas fechas, ya conocemos la lista de los nominados para los premios de la Academia en Estados Unidos, es decir los Oscar 2008. ¿Sorpresas? Pues para mi, la sorpresa ha sido Michael Clayton. Había leído cosas bastante normalitas de ella, tirando a flojas (aún no la he visto) por lo que no la consideraba como gran favorita, sino más bien como una opción de un par de nominaciones. Pero al final ha resultado ser una de las favoritas al saberse el número de estatuillas a las que opta; 7 en concreto.



Se confirma también lo que veníamos oyendo a gritos: Bardem nominado al Mejor actor de reparto por su papel de psicópata en la cinta de los Coen. En la otra cara de la moneda del cine nacional El orfanato, apartada en el último momento a optar a la estatuilla de Mejor película de habla no inglesa. Y es que la verdad, es un tema tan manido y tocado ya por el cine, que sinceramente no me sorprende en absoluto. No dudo de su calidad, pero no la veo compitiendo por este galardón, junto con el resto de las películas que han sido nominadas a los Oscar.

Entre los grandes olvidados tenemos a Ridley Scott con su American gangster, y a David Fincher con Zodiac. Lo siento David, pero no desesperes, Welles, Kubrick y Hitchcock tampoco tienen Oscar y míralos, en lo más alto de la historia del cine. No he visto American gangster, pero lo siento mucho por Zodiac, pues era una de mis grandes apuestas (y de las mejores películas de 2007) para los premios. Una lástima sin duda.

Y es que este año, la cosa ha estado muy repartida, no sobresaliendo ninguna clara favorita. El máximo número de opciones recae sobre la última cinta de los hermanos Coen, No country for old men (¿alguien se sorprende?) y Pozos de ambición, ambas con estreno en España previsto para la primera quincena de Febrero.


Tras ellas, se encuentran Michael Clayton como ya he comentado, y Expiacion, con 7 nominaciones cada una. Y atención a Juno -la cinta indie de este año- que se cuela en el apartado de Mejor Película y Mejor Director, y puede ser la sorpresa de la noche. Yo desde luego estoy deseando verla.


La verdad es que no he tenido opción de ver todavía ninguna de las que optan a Mejor Película, ya sea por la fecha de estreno que todavía no se ha producido, como por falta de interés en el caso de Michael Clayton y Expiacion. Pero como propósito de cada año, me obligo a verlas lo antes posible, y poder tomar una decisión objetiva.

Sin más, os dejo la lista de todos los nominados para los Oscar 2008. La fecha de entrega de los premios, el 24 de Febrero. Hasta entonces, todo son conjeturas. Mi apuesta, la cinta de los Coen, No country for old men para los grandes premios.


> Mejor película
Expiación - Más allá de la pasión (7 nominaciones)
Michael Clayton (7 nominaciones )
No es país para viejos (No Country for Old Men) (8 nominaciones)
Pozos de ambición (There Will Be Blood) (8 nominaciones)
Juno (4 nominaciones)

> Mejor director
Ethan Coen, Joel Coen por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Paul Thomas Anderson por Pozos de ambición (There Will Be Blood)
Julian Schnabel por La escafandra y la mariposa
Jason Reitman por Juno
Tony Gilroy por Michael Clayton

> Mejor actor principal

George Clooney por Michael Clayton
Daniel Day-Lewis por Pozos de ambición (There Will Be Blood)
Johnny Depp por Sweeney Todd: El barbero diabólico de la calle Fleet
Tommy Lee Jones por En el valle de Elah
Viggo Mortensen por Promesas del Este

> Mejor actriz principal
Cate Blanchett por Elizabeth: La edad de oro

Julie Christie por Lejos de ella (Away From Her)
Marion Cotillard por La vida en rosa
Laura Linney por La familia Savages
Ellen Page por Juno

> Mejor actor de reparto

Casey Affleck por El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford
Javier Bardem por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Philip Seymour Hoffman por La guerra de Charlie Wilson
Hal Holbrook por Hacia rutas salvajes (Into the Wild)
Tom Wilkinson por Michael Clayton

> Mejor actriz de reparto
Cate Blanchett por I'm Not There

Ruby Dee por American Gangster
Saoirse Ronan por Expiación - Más allá de la pasión
Amy Ryan por Adiós pequeña, adiós
Tilda Swinton por Michael Clayton

> Mejor guión original

Diablo Cody por Juno
Nancy Oliver por Lars and the Real Girl
Tony Gilroy por Michael Clayton
Brad Bird, Jan Pinkava, Jim Capobianco por Ratatouille
Tamara Jenkins por La familia Savages

> Mejor guión adaptado

Christopher Hampton por Expiación - Más allá de la pasión
Sarah Polley por Lejos de ella (Away From Her)
Ronald Harwood por La escafandra y la mariposa
Ethan Coen, Joel Coen por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Paul Thomas Anderson por Pozos de ambición (There Will Be Blood)

> Mejor fotografía

Roger Deakins por El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford
Seamus McGarvey por Expiación - Más allá de la pasión
Janusz Kaminski por La escafandra y la mariposa
Roger Deakins por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Robert Elswit por Pozos de ambición (There Will Be Blood)

> Mejor montaje
Christopher Rouse por El ultimatum de Bourne

Juliette Welfling por La escafandra y la mariposa
Jay Cassidy por Hacia rutas salvajes (Into the Wild)
Roderick Jaynes por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Dylan Tichenor por Pozos de ambición (There Will Be Blood)

> Mejor dirección artística

Arthur Max, Beth A. Rubino por American Gangster
Sarah Greenwood, Katie Spencer por Expiación - Más allá de la pasión
Dennis Gassner, Anna Pinnock por La brújula dorada
Dante Ferretti, Francesca Lo Schiavo por Sweeney Todd: El barbero diabólico de la calle Fleet
Jack Fisk, Jim Erickson por Pozos de ambición (There Will Be Blood)

> Mejor vestuario

Albert Wolsky por Across the Universe
Jacqueline Durran por Expiación - Más allá de la pasión
Alexandra Byrne por Elizabeth: La edad de oro
Marit Allen por La vida en rosa
Colleen Atwood por Sweeney Todd: El barbero diabólico de la calle Fleet

> Mejor maquillaje

Didier Lavergne, Jan Archibald por La vida en rosa
Rick Baker, Kazuhiro Tsuji por Norbit
Ve Neill, Martin Samuel por Piratas del Caribe: en el fin del mundo



> Mejor sonido
Scott Millan, David Parker, Kirk Francis por El ultimatum de Bourne
Skip Lievsay, Craig Berkey, Greg Orloff, Peter Kurland por No es país para viejos
Randy Thom, Michael Semanick, Doc Kane por Ratatouille
Massey, David Giammarco, Jim Stuebe por 3:10 to Yuma
Kevin O’Connell, Greg P. Russell, Peter J. Devlin por Transformers


> Mejores efectos sonoros
Karen Baker Landers, Per Hallberg por El ultimatum de Bourne

Skip Lievsay por No es país para viejos (No Country for Old Men)
Randy Thom, Michael Silvers por Ratatouille
Matthew Wood por Pozos de ambición (There Will Be Blood)
Ethan Van der Ryn, Mike Hopkins por Transformers

> Mejores efectos visuales
Michael Fink, Bill Westenhofer, Ben Morris, Trevor Wood por La brújula dorada

John Knoll, Hal Hickel, Charles Gibson por Piratas del Caribe: en el fin del mundo
Scott Farrar, Scott Benza, Russell Earl, John Frazier por Transformers



> Mejor largometraje animación
Persépolis

Ratatouille

Locos por el surf

sábado, 19 de enero de 2008

Perdición

Perdición: otro gran clásico entre los clásicos. Cine negro en estado puro a cargo del maestro entre los maestros, Billy Wilder. Allá por 1943, comenzó el rodaje el director vienés de Perdición (Double indemnity), la que se convertiría con los años en su primera obra maestra. El film con el crimen perfecto, bueno casi perfecto. A partir del minuto 5, asistimos aun larguísimo e increíble flashback donde el protagonista, un excepcional Fred MacMurray, nos pone en antecedentes gracias a una voz en off que hace las veces de narrador. Desde aquí, da comienzo un viaje sin retorno donde habrán mentiras, pasiones, traiciones, dinero, amistad y muerte. Billy Wilder, se aleja de los cánones del cine de Hollywood de los años 40, mostrándonos un Los Ángeles muy alejado del típico sueño americano. Barbara Stanwyck completa un magnífico papel como femme fatal fría y calculadora, capaz de todo por asegurarse (nunca mejor dicho) un futuro. De atmósfera oscura y pesada, y con un ritmo tenso, rápido y vertiginoso, nos atrapa casi sin darnos cuenta, gracias a un vigoroso tempo narrativo, perfecto en todos los aspectos. Perdición se convierte en todo un gusto para nuestros sentidos a través de un solido guión que refleja el ansia y desesperación que uno está dispuesto a hacer por una mujer y/o dinero, mucho dinero. Por momentos me ha recordado a la excepcional Crimen Perfecto de otro maestro como es Hitchcock, pero al final han resultado ser completamente diferentes, salvo por lo del crimen perfecto claro. Perdición, debe su éxito no sólo a un guión soberbio donde nada se escapa, sino también a la fotografía quien nos sitúa en una California lluviosa y oscura, llena de simbolismos. Pero curiosa e injustamente, a pesar de sus seis nominaciones a los Oscar, Perdición no recibió ninguno. Sin embargo, el tiempo le rendiría la justicia que se le había quitado años antes a este film que no ha perdido nada de su encanto y queda como una de las mejores cintas de cine negro que se han realizado jamas. Destacar el erótico plano de Barbara bajando las escaleras con esa semi metáfora en forma de pulsera atada al tobillo de nuestra protagonista, y la declaración de amor final entre hombre y hombre que cierra la cinta con un perfecto plano (el cigarro, la cerilla y los dos hombres) que ha pasado a la historia. Mi calificación ha sido de 9 porque considero que falta algo que nos diga que pasa con ciertos personajes de cara al final del film, como la hija y su novio, o el director de la compañía de seguros. Pese a ello, todos los elementos de Perdición, desde el guión y los diálogos punzantes llenos de doble sentido debido a la censura, la escenificación, la interpretación brillante de la pareja de actores, la música y los escenarios, hacen de ella un clásico del cine, y uno de los cimientos principales del cine negro.
Puntuación: 9 sobre 10.

La última noche

La última noche: decidí ver esta película por las buenas críticas que había cosechado en Filmaffinity y su alta puntuación (un 7,7 en Filmaffinity no se consigue así como así) y cierto es que me llevé una grata sorpresa con la cinta de Spike Lee. No he visto toda su filmografía, pero creo que es difícilmente superable, pues el listón está muy alto con La última noche. El nivel interpretativo es altísimo, desde un inconmensurable Edward Norton (va por ti cariño), en uno de sus mejores papeles, cargando con todo el peso de la obra sin inmutarse; hasta el resto del reparto de lujo (Philip Seymour Hoffman, perfecto; Barry Pepper, sublime; y Rosario Dawson, normalita) sabiamente elegido y dirigido por Spike Lee. El film, envuelto en forma de falso drama, narra las últimas 24 horas en libertad de un traficante de drogas. Primer punto para la historia, pues pocas veces vemos las horas previas a tan significante hecho en la vida de una persona. Bien narrada de cabo a rabo, no pierde interés a lo largo de las algo más de dos horas de duración, y eso en parte gracias a un incombustible Edward Norton en el papel de antihéroe, que una vez más nos demuestra que es un camaleón y se atreve con cualquier papel (Hulk próximamente). No sólo se atreve, si no que nos embauca con su presencia. De estilista y preciosa fotografía, con la ciudad de Nueva York como telón de fondo, Lee se permite hacer un pequeño homenaje a NY y sus ciudadanos, aún afectados por el 11-S (la película tiene fecha de 2002), con varias reseñas a este suceso, como en los títulos de crédito y el apartamento de Barry Pepper. El descenso a los infiernos es captado de forma magistral y es al que se tiene que enfrentar Norton, poniendo en duda toda moralidad existente en el espectador. Un Norton desgarrador, nos regala un recital en prácticamente cada secuencia. Escenas impagables aguardan en este largometraje (en especial el monólogo frente al espejo (inglés); y en español; simplemente, IMPRESIONANTE) poético, envuelto en un halo reflexivo y con un trasfondo humano y social que pocas veces encontramos en el cine de Spike Lee. De onírico y abierto final (no se te impone nada), no abunda en el lagrimeo fácil -es mas, escasea- de este tipo de películas ejecutado a través de manipulaciones sentimentales, y posee una belleza excitante e innata gracias en buena medida a la ciudad de Nueva York. Excelente film reflexivo que juega con nuestra moral a su antojo; de obligado visionado, con un sobrenatural Norton y una preciosista fotografía aderezada de una brillante narrativa. Muy buena en todos los sentidos. Puntuación: 8 sobre 10.

miércoles, 16 de enero de 2008

Casablanca

Casablanca: Bueno..., ¿pues que decir de Casablanca que no esté dicho ya? Primero, que era un sacrilegio no haberla visto hasta el fin de semana pasado. No tengo perdón, lo sé. ¿Que se puede decir de Casablanca, salvo que es una obra maestra? Obra maestra y una de las cinco películas más importantes que ha parido el cine clásico, moderno y actual. Una de las cinco, por no decir la mejor, ya que hasta el momento Citizen Kane (1941, un año anterior a Casablanca) sigue ostentando con el primer puesto en la revista Cahiers du cinéma. Actualmente, el guión de Casablanca está considerado como el mejor guión que se ha escrito en la historia del cine según la Asociación de Guionistas de Estados Unidos. A pesar del peso y repercusión que tiene hoy en día Casablanca, tuvo un inicio titubeante, sin embargo fue ganando popularidad a medida que pasó el tiempo y se fue colocando siempre entre los primeros lugares de las listas de mejores películas. Gracias a las actuaciones carismáticas de Bogart y Bergman y la química entre ellos, así como la profundidad de las caracterizaciones, la intensidad de la dirección, el ingenio del guión y el impacto emocional de la obra en su conjunto, ha conseguido auparse como una indispensable joya clásica. Todas las escenas de Casablanca son de una belleza extrema, una maravilla para los sentidos y elevadas al infinito gracias a la pareja de actores y al excelente elenco de secundarios que abundan en el film. Humphrey Bogart interpreta el mejor papel de su carrera dirigiendo el famoso Rick's Cafe. Inteligente, sarcástico y mordaz, nos regala continuas perlas que pasarán a la posteridad del cine. Ingrid Bergman, para mi, transmite mucho más con los silencios que interpretando. Llena la pantalla con esos primerísimos planos en silencio. Juntos, consiguen una de las parejas con más química que se han visto en una pantalla. Según dicen, Bergman no sabía hasta los últimos días de rodaje, con quien de los hombres se iba a quedar. Con esto, Michael Curtiz conseguía que el papel de Ilsa se interpretara a medida que avanzaba la historia de la manera más real posible. Con frases míticas que han pasado a la historia del cine, como por ejemplo, Tócala de nuevo, Sam; Louis, creo que este es el principio de una gran amistad o Siempre nos quedará Paris, no se merece otro calificativo que no sea obra de arte. Lo siento por Citizen Kane, y reconozco el impacto que supuso la obra de Orson Welles tanto por su temprana edad, como por el montaje y dirección que tuvo, pero si tengo que elegir entre ambas como mejor película de la historia del cine, yo, de momento, y a falta de ver muchos más clásicos, me quedo con Casablanca.
Puntuación: 10 sobre 10.

Lisboa

Lisboa: Aquí tenemos un ejemplo clarísimo de la diferencia entre producir y dirigir una película en Hollywood y hacerlo en España. Este brillante thriller, a medio camino entre road movie y el cine negro te lo firman los hermanos Coen bajo una estupenda factura técnica y con unos actores de primer nivel, y se convierte en la revolución del año. Pero si nos despertamos del sueño, y tenemos a un director español desconocido hasta la fecha (sin el apadrinamiento de Del Toro), aunque eso si, con un trío de actores pocas veces superable dentro del cine patrio, nuestro film pasará sin pena ni gloria por las taquillas nacionales. Y eso es precisamente lo que ocurre con el largometraje de Antonio Hernández (autor de la excelente En la ciudad sin límites). Una road movie con una soberbia Carmen Maura -como siempre en ella-, acompañada por Sergi López (que por aquel entonces empezaba a resaltar en este mundo) y el siempre incombustible y genial Federico Luppi (me encanta este actor). El thriller, oscuro, desconcertante y a la vez inteligente en todo momento, mantiene en vilo al espectador durante todo el metraje, gracias al pulso narrativo que imprime y a lo bien rodado que está, jugando con la ambigüedad de los personajes y con el interés creado en el espectador por ver la resolución final. Y ese es el gran logro del director, el conseguir hacerte sentir igual que se siente el personaje de Sergi López (resulta raro verle en el papel de héroe y no de villano), sentir el desasosiego y el desconcierto de lo que está ocurriendo. El espectador, va desgranando poco a poco la historia, de forma que se entera al mismo tiempo que el protagonista, consiguiendo que la empatía se dispare hasta límites insospechados. Con un arrollador y nada previsible final, se cierra una grata sorpresa en forma de película, que pasó por nuestra cartelera -por desgracia- como una más. ¿Y quien dice que el cine español es malo?. Con cintas como esta, queda patente que no es así. Puntuación: 7 sobre 10.

domingo, 13 de enero de 2008

Caché (Escondido)

Caché (Escondido): Tengo que reconocer que me encanta Michael Haneke desde que vi ese agobiante y a la par brillante film titulado Funny Games, y del que él mismo ha remakeado 10 años después de su estreno. Pero tras el visionado de Caché, debo decir que únicamente me ha creado indiferencia. A nivel técnica es impecable, fiel a sus contínuos planos fijos que tan característicos son en sus obras, y a los brillantes planos secuencia que tanto abundan en Caché. Haneke mantiene su estilo en su última cinta, un retrato psicológico de una familia acomodada y burguesa (como no, en un film de Haneke), que empieza a recibir misteriosas grabaciones. Con una agobiante puesta en escena (100% Haneke), y de inquietante y perturbadora ambientación, mezcla a partes iguales el suspense más clásico con un terror sugerente. Un terror sugerente, puesto que obvia de forma invisible el miedo. Haneke sigue obsesionado con hacer pasar un mal rato al espectador y ciertamente lo consigue. Lo consigue a base de sugerir y no mostrar, al igual que ya hacia con Funny Games; y parece que no se le da del todo mal. Con un final tremendamente abierto y ambiguo, te obliga a sacar tus propias conclusiones. Así que aquellas personas que le gusta se lo den todo masticadito para que puedan aceptarlo y entenderlo todo antes de acostarse que no se acerquen a esta obra, puesto que les hará pensar larga y distendidamente sobre los distintos puntos de vista que nos ofrece. A mi personalmente, me ha hecho razonar algunas cosas y fijándome en el último plano fijo que cierra el film, puedo sacar un idea que no compartiré para no estropear la película a nadie. Algunos dirán que es extremadamente pretenciosa y que Haneke juega y se ríe de nosotros (no digo que no), pero eso ya lo sabían al ponerse a ver una cinta suya. Una de las figuras clave del cine moderno, tanto por su técnica como por la pertubadora atomósfera que envuelve sus obras es sin duda Michael Haneke. Puntuación: 7 sobre 10.

This is England

This is England: Excelente retrato sugerente y honesto de la Inglaterra de los años 80. Bajo el contexto de la deprimida situación política inglesa, donde la guerra de las Maldivas ha terminado hace unos meses y Margaret Thatcher continua gobernando con mano de hierro, un niño de 12 años se siente acogido en un peculiar grupo de jóvenes del movimiento skinhead que por aquel entonces empezaba a extenderse en los barrios de Inglaterra. El director británico, muy comprometido con la historia, ha sabido reflejar a la perfección la vida de un niño rechazado en el colegio y aceptado por un grupo skinhead. Puro cine social inglés bastante alejado del que nos tiene acostumbrados el siempre controvertido Ken Loach. Dividida en dos partes, una primera más cómica y realizada a la perfección tras una brillante presentación de los personajes, y una segunda que anida demasiado en el drama y el realismo social para afectar a la vena sensible del espectador; mantiene el interés gracias a la sencillez con la que el director va desgranando poco a poco todos los elementos del film y a la vez vemos la progresiva maduración personal y cultural de un chaval de 12 años que desembocará en un cambio de inocencia a experiencia. Se le echa en cara la ausencia de algunos personajes importantes de cara al final del largometraje donde su historia desaparece y no volvemos a saber nada más de ellos; así como la figura de la madre, que pasa de puntillas frente a la transformación física y psicológica de su hijo. Mención especial merece el pequeño actor Thomas Turgoose (ganador del premio de Mejor actor novel de 2006 en los British Independent Awards) que hace la película suya en todo momento y un -demasiado- sobreactuado Stephen Graham como skinhead racista. Radiografía social y humana llena de dramatismo, con un fuerte y crudo panorama de la Inglaterra de los años ochenta. Excelente ambientación, música e interpretación para una cinta que gustará a los interesados por las cuestiones sociales y su trasfondo humano. Con unos de los mejores títulos de crédito iniciales que he visto este último año (así como la música que recorre todo el metraje), This is England, merecida ganadora del premio a la Mejor película en los British Independent Awards, se convierte en todo un gusto para los sentidos y una de las 15 mejores películas del 2007. Puntuación: 8 sobre 10.

viernes, 11 de enero de 2008

Colaboración en BlogMix

Sólo quería anunciar que a partir de hoy comienzo una nueva andadura como redactor en la sección de cine del reciente portal de actualidad BlogMix. Prácticamente en el día de hoy, se han puesto en contacto conmigo, y hemos llegado al acuerdo de mi colaboración en su web. Seguiré hablando de cine por supuesto, pero en dos sitios distintos. Para el que no tenga información sobre BlogMix:

.:: BlogMix nace con el objetivo de ser un referente entre un público joven e inquieto, al que trataremos de mantener al día en numerosos asuntos que le conciernen. En BlogMix te informaremos de la actualidad cultural (Música,Cine,Tv...), los deportes, lo paranormal y todo lo relacionado con el ocio ::.

Desde aquí, comentar que es un honor que se hayan fijado en mi blog, ya que lo inicie como puro entretenimiento para escribir sobre lo que más me apasionaba (sin contar a mi chica) y que ha resultado ser una experiencia de lo más gratificante.


El portal todavía no ha arrancado. Están cerrando unos cuantos flecos y en breve comenzaremos a publicar noticias de actualidad para las diferentes secciones de la web. Yo particularmente, seguiré con lo que más me gusta (críticas de cine), pero el resto de contenidos prometen ser verdaderamente interesantes.

Desde aquí os animo a todos a colocarlo en vuestros favoritos, y visitarlo con asiduidad.

Gracias otra vez a los chicos de BlogMix. Siempre es un honor que reconozcan tu trabajo.


Luces, cámara y acción...

miércoles, 9 de enero de 2008

Una verdad incómoda

Una verdad incómoda: pues con dos Oscar en el bolsillo (mejor documental y mejor canción) y la figura de Al Gore como representante absoluto, este documental extra-mega-hiper sensacionalista y partidista se ha convertido en toda una revolución durante 2006 y 2007. Tal ha sido su efecto y repercusión, que va a ser emitido en gran parte de los colegios nacionales para concienciar a la población más joven del problema del cambio climático. No voy a entrar en polémicas, pero lo que está claro es que el señor Gore se está haciendo de oro gracias a sus -muy caras- charlas sobre el problema ambiental tan de moda últimamente. Este documental, transmite dicho problema como una catástrofe muy a corto plazo, gracias a la multitud de datos y de bonitas gráficas que utiliza Gore en su charla. Creo que abusa excesivamente de demagogia y sensacionalismo en favor de atraer al publico hacia su terreno. Sobra totalmente la historia del hijo, sus continuos viajes por el mundo y la pérdida de la presidencia. Sobra totalmente porque esto es un documental sobre el cambio climático, y no es necesario crear pena en el espectador para enfatizar aún más el problema. Muy triste lo del niño, sí, pero ¿de verdad era necesario para este tipo de documental? ¿Me quieres decir que a raiz del accidente de tu hijo te entró la vena greenpeace de salvar la Tierra? ¿De la noche a la mañana? Yes of course... Por eso viajas en jet privado y tu factura de electricidad es como la de un pueblo de 300 habitantes. En fin, dejando a un lado el partidista mensaje que transmite, Al Gore se muestra muy simpático y bonachón gracias en buena medida a la cantidad de chistes que su equipo le ha preparado para la ocasión, y a las efectistas y continuas gráficas que no hacen más que liar al público. En definitiva, un necesario documental e importante mensaje pero que peca de pretenciosidad y sensacionalismo. Salvo eso, de riguroso visionado para toda la sociedad, y una buena forma de concienciarnos de lo que ¿realmente? está pasando en nuestra ¿querida? Tierra. Puntuación: 6 sobre 10.

Halloween, el origen

Halloween, el origen: Resulta muy difícil plantarse a realizar un remake de una de las obras maestras del cine de terror o slasher de los años 70 y salir no sólo airoso sino que aprobado con nota. Pero Rob Zombie puede con todo. Me gusta el cine de Rob Zombie, no tanto La casa de los mil cadáveres (excesivo freakismo para mi) y demasiado Los renegados del diablo (genialidad extrema). Y ahora nos llega con el remake de Halloween, si señor. Dividimos el film en dos partes claramente diferenciadas. La primera, de absolutos 45 minutos maestros, rodados con pulso firme y determinación, y la segunda, de otros 50 minutos, pero que peca demasiado de previsibilidad en el cine de género y prácticamente no aporta nada nuevo; eso sí mucho superior a la media. Todavía estoy impresionado con la primera y soberbia parte del film. Se atreve a profundizar en la psicología del personaje de Michael Myers desde la infancia hasta su posterior fuga 17 años después. Si Carpenter conseguía sobrecoger al espectador en los 10 primeros minutos de Halloween, con esa cámara subjetiva realmente espeluznante, Zombie no sólo alarga la secuencia, sino que te sumerge en los orígenes de la mente de un precoz asesino (genial el niño que da vida a Myers y ese guiño del director a Kiss en la camiseta del chaval). Rob Zombie respeta al 100% el personaje y la historia original de Carpenter, dejando claro que él sólo le aporta un nuevo enfoque o punto de vista. Así, durante los primeros 45 minutos de metraje, el director se dedica a desgranar de forma agobiante, al niño Myers de 10 años que todos conocemos, pero que nunca antes habíamos visto y sabido de sus orígenes. Tras esta primera parte llega al auténtico remake, y es cuando Zombie pierde parte de la brillantez y agilidad de la que dota a la primera parte, para caer en el pasotismo y la previsibilidad que caracterizan estas cintas. Pese a todo ello, altamente recomendable por su primera parte. Atención a Malcolm McDowell (Alex en La naranja mecánica) como el doctor Samuel Loomis. Puntuación: 7 sobre 10.

lunes, 7 de enero de 2008

Saw IV

Saw IV: Definitivamente, la saga de Saw ha llegado a su fin. No a su fin como franquicia, ya que Lions Gate parece la gallina de los huevos de oro con Jigsaw, y mientras dure aprovecharán el tirón que tiene para hacer Saw V y Saw VI. Digo que se ha acabado por su guión, factura, historia y calidad. No se puede estirar más una saga cuando no da más de si. Si ya con la tercera parte el nivel bajó considerablemente, ahora esta cuarta no hay por donde cogerla. En primer lugar, esa narración incoherente a través de flashbacks, mezclando pasado y presente..., Sr.Lynn Bousman, con todos mis respetos usted no es (ni será a este paso) Iñarritu en Amores Perros o 21 gramos, y ni mucho menos Nolan en Memento o Tarantino en Pulp Fiction; entonces no lo intente por favor, deje eso a los profesionales de verdad. De narración zarrapastrosa, con multitud de agujeros negrísimos e incoherencias de guión nos la intenta colar distorsionando la realidad y mezclándonos continuamente flashbacks con actualidad. A todo esto le sumamos el (im)previsible giro argumental del final -típico en la saga- y tenemos una basura en toda regla. ¿Es que no se dan cuenta de que el giro de guión quedó más que agotado en la primera parte y si me apuras en la segunda? Pues no, parece que no lo entienden. Y para colmo, de los 83 -interminables-minutos que dura quitando créditos finales, 10 minutos se corresponden a escenas pasadas de las anteriores entregas, con lo cual queda reflejado la carencia de ideas por parte del equipo y la necesidad de rellenar metraje con flashbacks innecesarios que lo único que hacen es liar al espectador. Para los fans de la casquería y el gore, entre los que sin duda me encuentro, destacar únicamente la escena de la autopsia a Jigsaw con todo lujo de detalles y una única "prueba". Lo único que la hacia realmente interesante (las pruebas) ha perdido su originalidad y gracia. Una lastima, sin duda la peor de la saga, cogida de la mano junto con la 3. Por último, la frase vivo o muerto, tu decides acaba cansando cuando la oyes 20 veces... Renovarse o morir, nunca mejor dicho. Puntuación: 4 sobre 10.

Escuela de pringaos

Escuela de pringaos: La verdad es que esperaba mucho más de Todd Phillips en su regreso a la alocada comedia americana tras la infravalorada Road Trip, pero Escuela de pringaos no resulta más que una chorrada en forma de película. Pasará por las taquillas sin pena ni gloria (salvo para su público objetivo) e irá directamente a las estanterías de nuestros videoclubs donde probablemente disfrutará de mayor éxito en forma de algo que alquilar un sábado por la tarde. Sólo con el título, -como siempre otra pésima traducción- podemos augurarnos que nos espera. Cierto es que no buscas una obra maestra en este tipo de películas, pero un mínimo de entretenimiento e ingeniosos gags que te ayuden a desconectar durante 90 minutos. Y eso es lo que le falta a este largometraje. Con un humor de lo más tópico, el film se desarrolla a lo largo de un guión tonto sin ninguna chispa ni comicidad. Solo la interpretación de Billy Bob Thornton -con la voz del Dr.House- y un cameo de Ben Stiller es lo más reseñable de este truño carente de gracia. El personaje principal rebosa estupidez e indiferencia a partes iguales, sin ninguna escena divertida; cosa que si logran en sólo un par de ocasiones algunos secundarios. Clichés típicos americanos en una comedia que no aporta nada nuevo al género, resultando insusa y de lo más previsible. Huir ahora que podéis. Puntuación: 3 sobre 10.

viernes, 4 de enero de 2008

Soy leyenda

Soy leyenda: Tercera adaptación cinematográfica de la novela de ciencia ficción de Richard Matheson. Simple y manida versión con un ritmo de lo más irregular en cuanto a narración y acción, uso del flashback totalmente fallido que sólo busca la implicación del espectador sin conseguirla. Esta vez, cambiamos a Charlton Heston por Will Smith, le colocamos un perro que de pena cuando muera -así nos ganamos al publico de lágrima fácil- unos vampiros bastante pobres y muy mal conseguidos, y el resto que lo haga el equipo de marketing con las frases: el último hombre vivo sobre la tierra, o con la secuencia más cara de la historia. Refrito de virus infecciosos (28 días después, Resident Evil, Amanecer de los muertos...) donde sin duda lo mejor transcurre cuando Will Smith se encuentra solo en una Nueva York desierta. Impresionantes planos y recreación de un apocalíptico Manhattan asolado, donde el protagonista se divierte de día cazando ciervos (excelente escena) o yendo de compras, y escondiéndose de noche. Aceptable -no por su originalidad- hasta el momento en que aparecen los vampiros, donde el director pasa a decantarse por el espectáculo 100% americano en forma de presupuesto, y se olvida de todo lo expuesto hasta ahora. Por último, un tufillo semicatólico cogido con pinzas que abunda por doquier en los 15 minutos finales, donde se nos obliga a creer para ser salvados. Atención a los 30 segundos del final, la frase, el sonido de las campanas, la iglesia, las puertas de la salvación abriéndose de par en par y toda la comunidad de beatos que sale a recibirnos. En definitiva, una lamentable adaptación de todo un clásico, irregular, simple y con un uso 100% palomitero debido a toda la pirotecnia empleada. Solo se salva la decente actuación de un creíble Will Smith; salvo eso, Bochornoso. Puntuación: 5 sobre 10

Intacto

Intacto: Primera incursión de Fresnadillo en el largometraje y primer éxito. Intrigante thriller sobre el mundo que rodea la suerte de las personas. Filmada con pulso firme, valiente, ágil y tremendamente desconcertante, aborda el tema del azar pero elevado a la enésima potencia. Un guión demasiado laberíntico para lo que esconde en realidad, pero que en ningún momento recae en los clichés típicos de Hollywood. De inquietante planteamiento y puesta en escena, te mantiene en tensión durante buena parte del metraje. Cautiva y entretiene al espectador a partes iguales. Con una oscura y a ratos deslumbrante fotografía y ambientación, el director canario cerraría su ópera prima como una de las apuestas más firmes y consolidadas a nivel de taquilla y crítica de 2001. Gracias a Intacto, Fresnadillo convenció a Danny Boyle y se ganó a pulso el billete a EE.UU para rodar la excelente -y claramente superior- secuela de 28 días después. Puntuación: 8 sobre 10